lunes, 6 de diciembre de 2010

PONENECIAS DE LA UNIDAD PATRIÓTICA PARA EL ENCUENTRO DEL DIA 4 DEL G8



La izquierda electoral y las tareas pendientes
Foro: La Izquierda en Toluca
Fermín Carreño Meléndez


El contexto
La distinción entre izquierdas y derechas se aplicó, por primera vez a la política, en la Francia revolucionaria. La Asamblea Constituyente, inició sus trabajos en 1792. Los diputados se hallaban divididos en dos grupos enfrentados: el de la Gironda, que se situó a la derecha del Presidente, y el de la Montaña, que se situó a la izquierda. En el centro tomó asiento una masa indiferenciada a la que se designó como el Llano -o la Marisma-. Los girondinos deseaban restaurar la legalidad y el orden monárquico, mientras que La Montaña propugnaba un estado revolucionario, el cual, después de anular a los girondinos, desembocaría en lo que se conoció -lamentablemente, aunque con justicia- como el Terror. Así se produjo una identificación de la izquierda con la radicalización revolucionaria que, al grito de "Libertad, Igualdad y Fraternidad", desencadenaría una etapa de utopías y ferocidad que sólo lograría detener el golpe de Estado de Bonaparte. Los implacables Robespierre, Danton y Marat fueron los caudillos y los definidores del primer partido político francés que se situó a la izquierda.
Qué es la izquierda?
Sin entrar en una gran discusión del concepto podríamos señalar a grandes rasgos que la izquierda se constituye sobre una escala de valores, entre los que se destacan la plena dignidad humana, el altruismo y la igualdad. Su interpretación de la realidad la opone a una sociedad basada en relaciones de explotación y/o dominación entre los hombres y los estados. Sus objetivos históricos se orientan a la superación de esas relaciones, a la transformación radical de las sociedades basadas en las mismas. Su praxis se expresa en programas de lucha por la constitución de nuevas relaciones sociales y por representar los intereses de los sectores explotados, marginados y dominados de las sociedades historicas.1
De esta manera, una izquierda consecuente se vera ante un horizonte socialista. El socialismo es actualmente para la izquierda, tanto una superación de las sociedades capitalistas, centrales y dependientes, como de las experiencias de los socialismos realmente existentes.
El origen en México
A principios de 1919 surge el Partico Comunista Mexicano (PCM), y con ello una corriente de opinión y acción que planteaba en un sentido claramente progresista las concepciones ideológicas del Marxismo Leninismo , esta expresión se abrió camino con la hoz y el martillo bajo un manto negro y rojo que cubría diversos movimientos obreros, campesino y populares. Para 1980, frente al auge de diversas organizaciones revolucionarias de corte político militar, el gobierno mexicano reforma el sistema electoral e impulsa la Ley de Organizaciones y Procesos Político Electorales (LOPPE), apareciendo la izquierda legal que cambia las protestas por votos, confrontando a la Izquierda Revolucionaria y estableciendo como principio que el cambio del capitalismo seria por la vía electoral, al igual que lo pregonaban los partidos europeos conocidos como eurocomunistas, mismos que fueron sus ideólogos y  actualmente son el ejemplo a seguir a pesar de los grandes fracasos.
Izquierda y neoliberalismo
En el transcurso de la década de 1990, (Sader: 2009) el neoliberalismo penetró intensamente todo el espectro político de América Latina. El programa se aplicó originalmente por la extrema derecha en el Chile de Pinochet. Encontró otros adeptos en la derecha –como Alberto Fujimori en Perú–, pero también absorbió fuerzas que históricamente habían estado asociadas al nacionalismo: el PRI en México; el peronismo en Argentina bajo el mandato de Carlos Menem, y, en Bolivia, el Movimiento Nacionalista Revolucionario, el partido que había encabezado la revolución nacionalista de 1952 con Víctor Paz Estensoro. Después, el neoliberalismo se apoderó de la socialdemocracia, ganando la adhesión del Partido Socialista chileno, de Acción Democrática venezolana y del Partido Socialdemócrata brasileño. Se convirtió en un sistema hegemónico en prácticamente todo el territorio de América Latina.
El marco global de la lucha política e ideológica en América Latina se ha visto, pues, remodelado durante la hegemonía neoliberal. La transformación radical del equilibrio de poder impuesto por las dictaduras de las décadas precedentes experimentó un ulterior fortalecimiento con el nuevo orden mundial.
El reconocimiento del sistema capitalista como una realidad global contra la que no se puede luchar de raíz. La postura de que es posible darle a este capitalismo salvaje un rasgo civilizado: humanizar las relaciones de explotación del trabajo y de depredación de la naturaleza. Aspirar a construir una democracia de tinte representativo que no atente contra los elementos sagrados del sistema: la alta propiedad privada y el libre comercio de las grandes empresas. El poder político como el espacio de decisiones de carácter público para la protección de los intereses particulares de los grupos privilegiados.
La renuncia a concepciones fundamentales que en su momento le dieron razón de ser a la propia ideología, como la división y la lucha de clases sociales, la idea de que el Estado es un instrumento de represión en poder de la clase económicamente poderosa, la necesidad de darle a toda lucha emancipadora un carácter de clase y el objetivo de transformar a fondo las relaciones económicas y políticas para construir un horizonte de igualdad y justicia social donde nadie quede excluido por ninguna razón.
Estas de acuerdo con Guzmán (Guzmán: 2009) Son algunas de las características que distinguen ahora a un tipo de corriente política que se asume como de izquierda. Es la izquierda que reniega de su propio pasado y que no se atreve a incomodar a quienes, desde la derecha, no han cejado en su empeño de hacerse de un poder hegemónico para beneficio exclusivo de la clase empresarial. Esta izquierda que llama empleadores a quienes imponen relaciones de trabajo cada vez más desventajosas e indignas para los trabajadores; que alteran el medio ambiente con los desechos de sus empresas y que aumentan inhumanamente los índices de pobreza y de marginación en el mundo.
En contra partida y ante el abandono de las fuerzas populares por los antiguos aliados nacionalistas o socialdemócratas y las duras consecuencias sociales de los modelos económicos de libre mercado, propiciaron  la aparición de movimientos sociales en primera línea de la resistencia contra el neoliberalismo. Ésta es la tercera y última estrategia surgida desde abajo. (Sader: 2009)
Los zapatistas, el movimiento de campesinos sin tierra (MST) en Brasil, los movimientos indígenas surgidos en Bolivia y Ecuador, o los piqueteros, activistas desempleados en Argentina, no son sino algunos de los grupos pioneros en esta nueva militancia. Han resistido dando lo mejor de sí mientras el neoliberalismo privaba al Estado de sus funciones mediante la privatización integral de las empresas públicas y la expropiación de los derechos al empleo formal, la salud y la educación. La oposición al ALCA fue el aspecto central de la plataforma zapatista hecha pública en 1994. (Sader: 2009)
La situación Actual
De nada sirve que el Programa Alternativo de Nación, sea el único de la izquierda electoral que avanza un poco en la ruptura con el modelo neoliberal, si la dirección actual está dispuesta a tirarlo a la basura por unas cuantas prebendas gubernamentales.
La exclusión de candidaturas y las opiniones no identificadas con el poder político, el endurecimiento de los requisitos electorales y la acumulación del poder han sustituido a la lucha ideológica, entonces la lucha por el poder se identifica con complacer mejor los deseos de los poderosos, los partidos políticos han devenido entonces en el filtro de ese poder .

Esa política ha dejado de lado, no sólo a los antecedentes históricos de las agrupaciones, sino además a su razón misma de ser, esto es aún más grave en el terreno de la izquierda en donde el utilitarismo ha sustituido a las doctrinas; así la izquierda electoral cada día es más moderada y luego se torna en una simple chamba.

La retórica ha sustituido a la doctrina social y ahora el aparato de poder es multipartidista, por ello ahora no se defienden las posiciones de las clases sociales, sino las de los grupos de poder, pues ellos patrocinan las candidaturas.

Los resultados recientes para “seleccionar” a los candidatos a puestos de representación proporcional, volvieron a mostrar la podredumbre que prevalece; es clara la imposición de candidatos cómodos; el reciclado de viejos legisladores que en su vida parlamentaria no se atrevieron a subir a tribuna, no digamos de aquellos que se enfermaban a la hora de las votaciones, para complacer a sus jefes, patrones y aliados políticos conectados a las casas de gobierno estatales y/o federales. Cuántos de ellos se preocuparon por lograr mayores presupuestos para el desarrollo regional y municipal. La mayoría le interesa asegura “hueso” por 3 años más.

Cuantos candidatos a presidentes municipales repiten nuevamente. Están muy “preocupados” por gobernar a los desprotegidos. En el caso del estado de México, como en la mayoría de los estados, no existe un proyecto de desarrollo municipal.
Es decepcionante ver los resultados de los gobiernos de “izquierda” en nuestros municipios; predomina el saqueo, el atraso, y es manifiesta la falta de perspectiva de desarrollo.

En el caso de quienes fueron los candidatos a legisladores federales o locales se repite la misma situación; aquellos que tienen el gran merito de cargar el portafolio, ser el chofer, o ser dama de compañía en las travesías “revolucionarias” del jefe de la tribu.

Una cosa nos queda claro que llegaron a la dirección de manera infausta, el acarreo, la despensa; el acuerdo con el gobernador, con el espurio, la transa, el relleno de urnas y demás fueron su táctica y estrategia.

Algunos personajes de la dirección asumen posiciones personales por encima de los documentos propios del partido; Jesús Ortega señalaba “que estamos por una economía de mercado. Es más muchos de los regidores pasados y actuales, hacen declaraciones a nombre del Partido, erigiéndose en los voceros únicos e irremediables para fijar las posturas que ellos consideran más convenientes a sus intereses. Estas acciones demuestran nuevamente la verdadera catadura de “los dirigentes”; el berrinche, la revancha, la insidia, el bloqueo, el colaboracionismo, es asunto de todos los días.

En muchos de los candidatos se borro la diferencia del PRD con los otros partidos, en ese pragmatismo ramplón hoy postulan a panistas, priistas y alguna  otra variedad de personajes “democráticos”.

En la historia de participación electoral de los regidores y diputados emanados de las filas de la “izquierda” en Toluca, ha pasado desapercibidos por la mayoría de los electores. Es cotidiano leer en la prensa como los representantes de la “izquierda” se alinean cómodamente a los designios de los presidentes municipales y su partido, aún en contra de los interese de los habitantes; el caso de la reubicación de la terminal de autobuses, los incrementos al predial y servicios o hasta guardan silencio en casos de represión a los inconformes.
O cuántos conocen las propuestas? de desarrollo municipal; de seguridad, de promoción a la organización ciudadana; de mejoramiento a los servicios municipales. A los compañeros que son representantes populares se las ha olvidado que se deben a la población y al partido, que están ahí para servir al pueblo, no para servirse de él.

En la prensa local de Toluca, las editoriales hacen referencia al enriquecimiento fasttrack de “nuestros excelsos” representantes de la izquierda electoral, en funciones y ex; diputados, presidentes municipales, senadores y regidores.

Es más no se nos olvide que en el caso de San Salvador Atenco, fue el propio alcalde (en ese tiempo) de Texcoco, quien se presto y sirvió de comparsa con el gobierno actual para reprimir a los integrantes del Frente por la Defensa de la Tierra. Nuevamente la prensa local dio testimonio con notas periodísticas e inserciones pagadas, donde el entonces Coordinador de la Bancada del PRD, “aplaudía y respaldad las acciones del gobierno estatal para mantener la paz social y garantizar la vida de las instituciones democráticas”.

 Como señala Alfonso Sánchez en su editorial (la jornada 14/mayo/2009, pág. 23) “…la política sin escándalo es sencillamente inimaginable, pues en la lucha por el poder, dicen, todo se vale y mejor tenerlo en cuenta. El doble lenguaje, la traición, la mentira sistemática, la simulación no aparecen como atributos negativos excepcionales de algunos partidos o personajes, lo cuales deberían rechazarse sin preguntar de dónde vienen (o someterse a los tribunales), sino como requisitos indispensables para la consecución de ciertos objetivos, cuya legitimidad, por el solo hecho de servirse de tales medios, resultaría por lo menos dudosa. Así es la política democrática, dicen, convencidos de que una vez aceptado el juego la palabra final la tendrán los resultados….”


La izquierda oficial parece estar montada en un lindo y encantador carrusel. Sus vueltas parecen recordar un eterno retorno – por aquello de utilizar la analogía de Nietzsche. Al parecer tenemos una izquierda que no se recupera de los tropiezos. Parece retornar una y otra vez a un modus operandi estéril que las ha llevado a una derechización y a arrastrar cuesta abajo sus niveles de influencia política, tal como sucede en algunos países europeos.
Esencialmente, la crisis de la izquierda electoral es consecuencia directa de la crisis de lo político propia de nuestros tiempos. En México los niveles de deslegitimación y cuestionamiento tanto al Estado, a los partidos políticos, instituciones gubernamentales, sindicatos, la banca privada y al marco jurídico que nos cobija (Estado de Derecho), por ende, a nuestro «orden democrático» liberal, alcanza niveles históricos. Esencialmente, y sin quererlo, nuestra izquierda está en el mismo bote. La izquierda, al igual que los tradicionales partidos políticos, se ha convertido en un pequeño grupo cerrado y autorreferencial, que la conduce insistentemente a un tipo de incesto intelectual, en donde no hay contacto con las realidades locales, regionales (América Latina) y global. Las líneas divisorias entre izquierda oficial y la derecha, crecientemente, continúan desapareciendo.
Seguimos enfrascados en el limbo electoral pendiente de éste, aquél y el otro posible candidato para las próximas elecciones. Se nos hace imprescindible salir del carrusel electoral y partidista y reconocer un movimiento distinto, uno que no va a vuelta redonda como el carrusel, sino hacia delante, que emana esencialmente de las diversas experiencias y subversiones que acontecen en lo cotidiano de la vida mexicana. Ese movimiento paralelo es el movimiento de la sociedad: llenos de tropezones, de contradicciones, no uniforme y operante en diversos tiempos y espacios. Este movimiento resiste no sólo al gobernador, al presidente, al legislativo, sino que resiste diariamente contra una realidad mucho mayor.
Esta es la historia de la decadencia política que bajo el paraguas democrático, muestra sus más bajos intereses; recrudece la polarización social por el estancamiento de las élites en el poder. Tal parece que solo nos queda como opción, pedir que se vayan todos y si no hay que echarlos.

Los desafíos
La Izquierda ha sido una esperanza para millones de personas durante décadas. Fue una garantía, y lo sigue siendo, de que otro mundo es posible. Pero la Izquierda viene sufriendo una prolongada erosión que no sólo se refleja en su retroceso electoral. La ciudadanía no participa en las decisiones importantes y el tejido asociativo es cada vez más débil.
Los errores políticos han sido numerosos y no queremos ignorarlos. Pero el neoliberalismo no sólo ha creado una enorme precariedad laboral y destrucción ambiental, no sólo ha alargado el tiempo de trabajo a costa del tiempo reservado a todo lo demás. Además, ha mantenido la división sexual del trabajo obligando a las mujeres a sobrevivir a base de jornadas diferentes.
Además, ha segmentado a la inmensa mayoría de la ciudadanía, y muy especialmente a las trabajadoras y los trabajadores, fomentado la competencia entre nosotros, atomizándonos, transmitiéndonos la sensación, de que somos los únicos  responsables de los males que aquejan al mundo. De que no hay alternativa al actual orden de cosas.
Pero el neoliberalismo ha entrado en crisis. No ha muerto y hay intentos serios de recomponerlo. Pero sus recetas económicas, su influencia ideológica y su modelo de civilización están a la defensiva. Esto abre nuevas oportunidades para aquellos que creemos en una sociedad más justa y solidaria, en un modelo económico acorde con las necesidades de las personas y del medio ambiente, en la posibilidad y en la necesidad de una sociedad distinta. En algunos países esta situación está produciendo convergencias esperanzadoras entre todas las familias y sensibilidades de la Izquierda, en América Latina está abriendo un nuevo ciclo histórico.
Son procesos complejos en los que se tienen que abordar los desencuentros del pasado, los enfrentamientos entre el reformismo y el anticapitalismo más explícito, entre la cultura de la intervención directa y las formas más institucionales de participación política. Pero son procesos que despiertan esperanzas de un mundo mejor entre sectores amplios de la población.
Ha llegado la hora de poner en marcha este proceso en nuestro país. A pesar de la fragmentación de la Izquierda, del desencanto y de la desmovilización social, el potencial democrático de nuestra sociedad sigue siendo enorme. Debajo de la cáscara institucional y de la cultura política oficial, de la corrupción y la manipulación informativa, existen amplios espacios en los que la solidaridad, los valores de justicia social, de igualdad de género, de honestidad y transparencia siguen siendo innegociables.
Muchas personas que pueblan estos espacios realmente creen que es necesario construir un orden social y económico más justo, una civilización más pacífica y cooperativa en el planeta, un sistema de trabajo que dignifique a las personas y no que las destruya. Es posible construir una sociedad más igualitaria entre hombres y mujeres. En ellos y en ellas late la convicción de que es necesario crear una sociedad distinta a la capitalista. El momento es propicio para dar un paso así.
El modelo económico y productivo en México inaugurado hace varias décadas ha tocado fondo.
La cultura política, fuertemente bipartidista, alimenta la corrupción y el cohecho. Su modelo económico, basado en la renta financiera e inmobiliaria, nutre el poder de la banca frente al resto de la sociedad, fomenta la cultura del dinero fácil frente al trabajo productivo, la especulación frente al esfuerzo reconocido.
Nos corresponde iniciar un proceso amplio y capital que permita darle a este deseo y a esta necesidad de cambio una expresión política, cultural y organizativa. Los debemos comprometemos a trabajar para que todas las personas, organizaciones y grupos activos que nos reclamamos de la Izquierda empecemos a converger en un espacio común de deliberación y aprendizaje colectivo.
Es necesario reunirnos a nivel de barrio, de centro de trabajo, de ciudad, de estado, de escuela. De organizar foros temáticos y sectoriales para la refundación de la Izquierda, espacios en los que pretendemos ponernos de acuerdo sobre cómo abordar los grandes y los pequeños problemas que nos afectan, para intentar solucionarlos e ir definiendo un nuevo proyecto político de tipo democrático, popular  y socialista.
Estos espacios tienen que ser plurales, pero tienen que comprometerse con un proyecto solidario en todo el municipio, el Estado y el mismo país, ser algo más que la suma de organizaciones, de núcleos e iniciativas ya existentes. Tienen que aunar y aprovechar los esfuerzos del pasado, pero también tienen que fomentar las iniciativas innovadoras.
Nuestro objetivo es crear espacios de organización y participación ciudadana dentro y fuera del trabajo, núcleos de poder organizado para que las personas puedan trasladar directamente sus necesidades a las instituciones, a los medios de comunicación, a los centros del poder político local, y estatal.
Nuestro objetivo, en definitiva, es que nuestra generación vaya construyendo una sociedad mucho más justa, solidaria y sustentable, una sociedad socialista para el siglo XXI.









Bibliografía
CARREÑO, Fermín (2009), Izquierda moderna: La otra cara del neoliberalismo. México, Ed. Unidad Patriótica.
SADER, Emir (n.d). América Latina ¿el eslabón más débil? artículos http://www.newleftreview.org
N. Bobbio, (1992)"Nuevas fronteras de la izquierda", en Leviatan, num. 47, Madrid.
Ramón Guzmán Ramos “La izquierda (neo) liberal” La jornada d Michoacán,  27/10/2009



La izquierda electoral y las tareas pendientes
Foro: La Izquierda en Toluca
Fermín Carreño Meléndez


El contexto
La distinción entre izquierdas y derechas se aplicó, por primera vez a la política, en la Francia revolucionaria. La Asamblea Constituyente, inició sus trabajos en 1792. Los diputados se hallaban divididos en dos grupos enfrentados: el de la Gironda, que se situó a la derecha del Presidente, y el de la Montaña, que se situó a la izquierda. En el centro tomó asiento una masa indiferenciada a la que se designó como el Llano -o la Marisma-. Los girondinos deseaban restaurar la legalidad y el orden monárquico, mientras que La Montaña propugnaba un estado revolucionario, el cual, después de anular a los girondinos, desembocaría en lo que se conoció -lamentablemente, aunque con justicia- como el Terror. Así se produjo una identificación de la izquierda con la radicalización revolucionaria que, al grito de "Libertad, Igualdad y Fraternidad", desencadenaría una etapa de utopías y ferocidad que sólo lograría detener el golpe de Estado de Bonaparte. Los implacables Robespierre, Danton y Marat fueron los caudillos y los definidores del primer partido político francés que se situó a la izquierda.
Qué es la izquierda?
Sin entrar en una gran discusión del concepto podríamos señalar a grandes rasgos que la izquierda se constituye sobre una escala de valores, entre los que se destacan la plena dignidad humana, el altruismo y la igualdad. Su interpretación de la realidad la opone a una sociedad basada en relaciones de explotación y/o dominación entre los hombres y los estados. Sus objetivos históricos se orientan a la superación de esas relaciones, a la transformación radical de las sociedades basadas en las mismas. Su praxis se expresa en programas de lucha por la constitución de nuevas relaciones sociales y por representar los intereses de los sectores explotados, marginados y dominados de las sociedades historicas.1
De esta manera, una izquierda consecuente se vera ante un horizonte socialista. El socialismo es actualmente para la izquierda, tanto una superación de las sociedades capitalistas, centrales y dependientes, como de las experiencias de los socialismos realmente existentes.
El origen en México
A principios de 1919 surge el Partico Comunista Mexicano (PCM), y con ello una corriente de opinión y acción que planteaba en un sentido claramente progresista las concepciones ideológicas del Marxismo Leninismo , esta expresión se abrió camino con la hoz y el martillo bajo un manto negro y rojo que cubría diversos movimientos obreros, campesino y populares. Para 1980, frente al auge de diversas organizaciones revolucionarias de corte político militar, el gobierno mexicano reforma el sistema electoral e impulsa la Ley de Organizaciones y Procesos Político Electorales (LOPPE), apareciendo la izquierda legal que cambia las protestas por votos, confrontando a la Izquierda Revolucionaria y estableciendo como principio que el cambio del capitalismo seria por la vía electoral, al igual que lo pregonaban los partidos europeos conocidos como eurocomunistas, mismos que fueron sus ideólogos y  actualmente son el ejemplo a seguir a pesar de los grandes fracasos.
Izquierda y neoliberalismo
En el transcurso de la década de 1990, (Sader: 2009) el neoliberalismo penetró intensamente todo el espectro político de América Latina. El programa se aplicó originalmente por la extrema derecha en el Chile de Pinochet. Encontró otros adeptos en la derecha –como Alberto Fujimori en Perú–, pero también absorbió fuerzas que históricamente habían estado asociadas al nacionalismo: el PRI en México; el peronismo en Argentina bajo el mandato de Carlos Menem, y, en Bolivia, el Movimiento Nacionalista Revolucionario, el partido que había encabezado la revolución nacionalista de 1952 con Víctor Paz Estensoro. Después, el neoliberalismo se apoderó de la socialdemocracia, ganando la adhesión del Partido Socialista chileno, de Acción Democrática venezolana y del Partido Socialdemócrata brasileño. Se convirtió en un sistema hegemónico en prácticamente todo el territorio de América Latina.
El marco global de la lucha política e ideológica en América Latina se ha visto, pues, remodelado durante la hegemonía neoliberal. La transformación radical del equilibrio de poder impuesto por las dictaduras de las décadas precedentes experimentó un ulterior fortalecimiento con el nuevo orden mundial.
El reconocimiento del sistema capitalista como una realidad global contra la que no se puede luchar de raíz. La postura de que es posible darle a este capitalismo salvaje un rasgo civilizado: humanizar las relaciones de explotación del trabajo y de depredación de la naturaleza. Aspirar a construir una democracia de tinte representativo que no atente contra los elementos sagrados del sistema: la alta propiedad privada y el libre comercio de las grandes empresas. El poder político como el espacio de decisiones de carácter público para la protección de los intereses particulares de los grupos privilegiados.
La renuncia a concepciones fundamentales que en su momento le dieron razón de ser a la propia ideología, como la división y la lucha de clases sociales, la idea de que el Estado es un instrumento de represión en poder de la clase económicamente poderosa, la necesidad de darle a toda lucha emancipadora un carácter de clase y el objetivo de transformar a fondo las relaciones económicas y políticas para construir un horizonte de igualdad y justicia social donde nadie quede excluido por ninguna razón.
Estas de acuerdo con Guzmán (Guzmán: 2009) Son algunas de las características que distinguen ahora a un tipo de corriente política que se asume como de izquierda. Es la izquierda que reniega de su propio pasado y que no se atreve a incomodar a quienes, desde la derecha, no han cejado en su empeño de hacerse de un poder hegemónico para beneficio exclusivo de la clase empresarial. Esta izquierda que llama empleadores a quienes imponen relaciones de trabajo cada vez más desventajosas e indignas para los trabajadores; que alteran el medio ambiente con los desechos de sus empresas y que aumentan inhumanamente los índices de pobreza y de marginación en el mundo.
En contra partida y ante el abandono de las fuerzas populares por los antiguos aliados nacionalistas o socialdemócratas y las duras consecuencias sociales de los modelos económicos de libre mercado, propiciaron  la aparición de movimientos sociales en primera línea de la resistencia contra el neoliberalismo. Ésta es la tercera y última estrategia surgida desde abajo. (Sader: 2009)
Los zapatistas, el movimiento de campesinos sin tierra (MST) en Brasil, los movimientos indígenas surgidos en Bolivia y Ecuador, o los piqueteros, activistas desempleados en Argentina, no son sino algunos de los grupos pioneros en esta nueva militancia. Han resistido dando lo mejor de sí mientras el neoliberalismo privaba al Estado de sus funciones mediante la privatización integral de las empresas públicas y la expropiación de los derechos al empleo formal, la salud y la educación. La oposición al ALCA fue el aspecto central de la plataforma zapatista hecha pública en 1994. (Sader: 2009)
La situación Actual
De nada sirve que el Programa Alternativo de Nación, sea el único de la izquierda electoral que avanza un poco en la ruptura con el modelo neoliberal, si la dirección actual está dispuesta a tirarlo a la basura por unas cuantas prebendas gubernamentales.
La exclusión de candidaturas y las opiniones no identificadas con el poder político, el endurecimiento de los requisitos electorales y la acumulación del poder han sustituido a la lucha ideológica, entonces la lucha por el poder se identifica con complacer mejor los deseos de los poderosos, los partidos políticos han devenido entonces en el filtro de ese poder .

Esa política ha dejado de lado, no sólo a los antecedentes históricos de las agrupaciones, sino además a su razón misma de ser, esto es aún más grave en el terreno de la izquierda en donde el utilitarismo ha sustituido a las doctrinas; así la izquierda electoral cada día es más moderada y luego se torna en una simple chamba.

La retórica ha sustituido a la doctrina social y ahora el aparato de poder es multipartidista, por ello ahora no se defienden las posiciones de las clases sociales, sino las de los grupos de poder, pues ellos patrocinan las candidaturas.

Los resultados recientes para “seleccionar” a los candidatos a puestos de representación proporcional, volvieron a mostrar la podredumbre que prevalece; es clara la imposición de candidatos cómodos; el reciclado de viejos legisladores que en su vida parlamentaria no se atrevieron a subir a tribuna, no digamos de aquellos que se enfermaban a la hora de las votaciones, para complacer a sus jefes, patrones y aliados políticos conectados a las casas de gobierno estatales y/o federales. Cuántos de ellos se preocuparon por lograr mayores presupuestos para el desarrollo regional y municipal. La mayoría le interesa asegura “hueso” por 3 años más.

Cuantos candidatos a presidentes municipales repiten nuevamente. Están muy “preocupados” por gobernar a los desprotegidos. En el caso del estado de México, como en la mayoría de los estados, no existe un proyecto de desarrollo municipal.
Es decepcionante ver los resultados de los gobiernos de “izquierda” en nuestros municipios; predomina el saqueo, el atraso, y es manifiesta la falta de perspectiva de desarrollo.

En el caso de quienes fueron los candidatos a legisladores federales o locales se repite la misma situación; aquellos que tienen el gran merito de cargar el portafolio, ser el chofer, o ser dama de compañía en las travesías “revolucionarias” del jefe de la tribu.

Una cosa nos queda claro que llegaron a la dirección de manera infausta, el acarreo, la despensa; el acuerdo con el gobernador, con el espurio, la transa, el relleno de urnas y demás fueron su táctica y estrategia.

Algunos personajes de la dirección asumen posiciones personales por encima de los documentos propios del partido; Jesús Ortega señalaba “que estamos por una economía de mercado. Es más muchos de los regidores pasados y actuales, hacen declaraciones a nombre del Partido, erigiéndose en los voceros únicos e irremediables para fijar las posturas que ellos consideran más convenientes a sus intereses. Estas acciones demuestran nuevamente la verdadera catadura de “los dirigentes”; el berrinche, la revancha, la insidia, el bloqueo, el colaboracionismo, es asunto de todos los días.

En muchos de los candidatos se borro la diferencia del PRD con los otros partidos, en ese pragmatismo ramplón hoy postulan a panistas, priistas y alguna  otra variedad de personajes “democráticos”.

En la historia de participación electoral de los regidores y diputados emanados de las filas de la “izquierda” en Toluca, ha pasado desapercibidos por la mayoría de los electores. Es cotidiano leer en la prensa como los representantes de la “izquierda” se alinean cómodamente a los designios de los presidentes municipales y su partido, aún en contra de los interese de los habitantes; el caso de la reubicación de la terminal de autobuses, los incrementos al predial y servicios o hasta guardan silencio en casos de represión a los inconformes.
O cuántos conocen las propuestas? de desarrollo municipal; de seguridad, de promoción a la organización ciudadana; de mejoramiento a los servicios municipales. A los compañeros que son representantes populares se las ha olvidado que se deben a la población y al partido, que están ahí para servir al pueblo, no para servirse de él.

En la prensa local de Toluca, las editoriales hacen referencia al enriquecimiento fasttrack de “nuestros excelsos” representantes de la izquierda electoral, en funciones y ex; diputados, presidentes municipales, senadores y regidores.

Es más no se nos olvide que en el caso de San Salvador Atenco, fue el propio alcalde (en ese tiempo) de Texcoco, quien se presto y sirvió de comparsa con el gobierno actual para reprimir a los integrantes del Frente por la Defensa de la Tierra. Nuevamente la prensa local dio testimonio con notas periodísticas e inserciones pagadas, donde el entonces Coordinador de la Bancada del PRD, “aplaudía y respaldad las acciones del gobierno estatal para mantener la paz social y garantizar la vida de las instituciones democráticas”.

 Como señala Alfonso Sánchez en su editorial (la jornada 14/mayo/2009, pág. 23) “…la política sin escándalo es sencillamente inimaginable, pues en la lucha por el poder, dicen, todo se vale y mejor tenerlo en cuenta. El doble lenguaje, la traición, la mentira sistemática, la simulación no aparecen como atributos negativos excepcionales de algunos partidos o personajes, lo cuales deberían rechazarse sin preguntar de dónde vienen (o someterse a los tribunales), sino como requisitos indispensables para la consecución de ciertos objetivos, cuya legitimidad, por el solo hecho de servirse de tales medios, resultaría por lo menos dudosa. Así es la política democrática, dicen, convencidos de que una vez aceptado el juego la palabra final la tendrán los resultados….”


La izquierda oficial parece estar montada en un lindo y encantador carrusel. Sus vueltas parecen recordar un eterno retorno – por aquello de utilizar la analogía de Nietzsche. Al parecer tenemos una izquierda que no se recupera de los tropiezos. Parece retornar una y otra vez a un modus operandi estéril que las ha llevado a una derechización y a arrastrar cuesta abajo sus niveles de influencia política, tal como sucede en algunos países europeos.
Esencialmente, la crisis de la izquierda electoral es consecuencia directa de la crisis de lo político propia de nuestros tiempos. En México los niveles de deslegitimación y cuestionamiento tanto al Estado, a los partidos políticos, instituciones gubernamentales, sindicatos, la banca privada y al marco jurídico que nos cobija (Estado de Derecho), por ende, a nuestro «orden democrático» liberal, alcanza niveles históricos. Esencialmente, y sin quererlo, nuestra izquierda está en el mismo bote. La izquierda, al igual que los tradicionales partidos políticos, se ha convertido en un pequeño grupo cerrado y autorreferencial, que la conduce insistentemente a un tipo de incesto intelectual, en donde no hay contacto con las realidades locales, regionales (América Latina) y global. Las líneas divisorias entre izquierda oficial y la derecha, crecientemente, continúan desapareciendo.
Seguimos enfrascados en el limbo electoral pendiente de éste, aquél y el otro posible candidato para las próximas elecciones. Se nos hace imprescindible salir del carrusel electoral y partidista y reconocer un movimiento distinto, uno que no va a vuelta redonda como el carrusel, sino hacia delante, que emana esencialmente de las diversas experiencias y subversiones que acontecen en lo cotidiano de la vida mexicana. Ese movimiento paralelo es el movimiento de la sociedad: llenos de tropezones, de contradicciones, no uniforme y operante en diversos tiempos y espacios. Este movimiento resiste no sólo al gobernador, al presidente, al legislativo, sino que resiste diariamente contra una realidad mucho mayor.
Esta es la historia de la decadencia política que bajo el paraguas democrático, muestra sus más bajos intereses; recrudece la polarización social por el estancamiento de las élites en el poder. Tal parece que solo nos queda como opción, pedir que se vayan todos y si no hay que echarlos.

Los desafíos
La Izquierda ha sido una esperanza para millones de personas durante décadas. Fue una garantía, y lo sigue siendo, de que otro mundo es posible. Pero la Izquierda viene sufriendo una prolongada erosión que no sólo se refleja en su retroceso electoral. La ciudadanía no participa en las decisiones importantes y el tejido asociativo es cada vez más débil.
Los errores políticos han sido numerosos y no queremos ignorarlos. Pero el neoliberalismo no sólo ha creado una enorme precariedad laboral y destrucción ambiental, no sólo ha alargado el tiempo de trabajo a costa del tiempo reservado a todo lo demás. Además, ha mantenido la división sexual del trabajo obligando a las mujeres a sobrevivir a base de jornadas diferentes.
Además, ha segmentado a la inmensa mayoría de la ciudadanía, y muy especialmente a las trabajadoras y los trabajadores, fomentado la competencia entre nosotros, atomizándonos, transmitiéndonos la sensación, de que somos los únicos  responsables de los males que aquejan al mundo. De que no hay alternativa al actual orden de cosas.
Pero el neoliberalismo ha entrado en crisis. No ha muerto y hay intentos serios de recomponerlo. Pero sus recetas económicas, su influencia ideológica y su modelo de civilización están a la defensiva. Esto abre nuevas oportunidades para aquellos que creemos en una sociedad más justa y solidaria, en un modelo económico acorde con las necesidades de las personas y del medio ambiente, en la posibilidad y en la necesidad de una sociedad distinta. En algunos países esta situación está produciendo convergencias esperanzadoras entre todas las familias y sensibilidades de la Izquierda, en América Latina está abriendo un nuevo ciclo histórico.
Son procesos complejos en los que se tienen que abordar los desencuentros del pasado, los enfrentamientos entre el reformismo y el anticapitalismo más explícito, entre la cultura de la intervención directa y las formas más institucionales de participación política. Pero son procesos que despiertan esperanzas de un mundo mejor entre sectores amplios de la población.
Ha llegado la hora de poner en marcha este proceso en nuestro país. A pesar de la fragmentación de la Izquierda, del desencanto y de la desmovilización social, el potencial democrático de nuestra sociedad sigue siendo enorme. Debajo de la cáscara institucional y de la cultura política oficial, de la corrupción y la manipulación informativa, existen amplios espacios en los que la solidaridad, los valores de justicia social, de igualdad de género, de honestidad y transparencia siguen siendo innegociables.
Muchas personas que pueblan estos espacios realmente creen que es necesario construir un orden social y económico más justo, una civilización más pacífica y cooperativa en el planeta, un sistema de trabajo que dignifique a las personas y no que las destruya. Es posible construir una sociedad más igualitaria entre hombres y mujeres. En ellos y en ellas late la convicción de que es necesario crear una sociedad distinta a la capitalista. El momento es propicio para dar un paso así.
El modelo económico y productivo en México inaugurado hace varias décadas ha tocado fondo.
La cultura política, fuertemente bipartidista, alimenta la corrupción y el cohecho. Su modelo económico, basado en la renta financiera e inmobiliaria, nutre el poder de la banca frente al resto de la sociedad, fomenta la cultura del dinero fácil frente al trabajo productivo, la especulación frente al esfuerzo reconocido.
Nos corresponde iniciar un proceso amplio y capital que permita darle a este deseo y a esta necesidad de cambio una expresión política, cultural y organizativa. Los debemos comprometemos a trabajar para que todas las personas, organizaciones y grupos activos que nos reclamamos de la Izquierda empecemos a converger en un espacio común de deliberación y aprendizaje colectivo.
Es necesario reunirnos a nivel de barrio, de centro de trabajo, de ciudad, de estado, de escuela. De organizar foros temáticos y sectoriales para la refundación de la Izquierda, espacios en los que pretendemos ponernos de acuerdo sobre cómo abordar los grandes y los pequeños problemas que nos afectan, para intentar solucionarlos e ir definiendo un nuevo proyecto político de tipo democrático, popular  y socialista.
Estos espacios tienen que ser plurales, pero tienen que comprometerse con un proyecto solidario en todo el municipio, el Estado y el mismo país, ser algo más que la suma de organizaciones, de núcleos e iniciativas ya existentes. Tienen que aunar y aprovechar los esfuerzos del pasado, pero también tienen que fomentar las iniciativas innovadoras.
Nuestro objetivo es crear espacios de organización y participación ciudadana dentro y fuera del trabajo, núcleos de poder organizado para que las personas puedan trasladar directamente sus necesidades a las instituciones, a los medios de comunicación, a los centros del poder político local, y estatal.
Nuestro objetivo, en definitiva, es que nuestra generación vaya construyendo una sociedad mucho más justa, solidaria y sustentable, una sociedad socialista para el siglo XXI.









Bibliografía
CARREÑO, Fermín (2009), Izquierda moderna: La otra cara del neoliberalismo. México, Ed. Unidad Patriótica.
SADER, Emir (n.d). América Latina ¿el eslabón más débil? artículos http://www.newleftreview.org
N. Bobbio, (1992)"Nuevas fronteras de la izquierda", en Leviatan, num. 47, Madrid.
Ramón Guzmán Ramos “La izquierda (neo) liberal” La jornada d Michoacán,  27/10/2009

DOCUMENTO PRESENTADOS POR LA UNI ENCUENTRO NAL 4 DE DICIEMBRE 2010

POSICIÓN DE MICHOACÁN ANTE LAS REUNIONES NACIONALES DEL G-8
Ciudad de México, 4 y 5 de diciembre del 2010

Estimadas compañeras y compañeros del G-8.
Ante todo reciban un afectuoso saludo de la delegación del estado de Michoacán, acudimos con la firme convicción de que este espacio reflexión, análisis, propuestas y acciones deben incidir de manera significativa y contundente en el rescate de nuestro partido, el de la Revolución Democrática.
En efecto, existe entre todos nosotros una visión y consenso general de la situación tan lamentable que priva en el país a 10 años de los gobiernos panistas; tenemos igualmente claro que hoy resulta un imperativo ético-político, el rescate de la Dirección Nacional del PRD, hoy en manos de quienes han declinado en sus convicciones de izquierda democrática, popular y moderna que tanto necesita nuestro querido México; ya empezamos a constatar en Oaxaca, más allá de la euforia mediática de la derrota del PRI y del gobernícola Ulises Ruíz, hoy sabemos quienes en realidad gobernarán y que proyecto impulsarán en los hechos; por ello no debemos permitir la alianza con el PAN en el Estado de México y con mayor razón a nivel nacional en el 2012.
Al mismo tiempo tenemos claro que la tarea más estratégica de las izquierdas de nuestro país, es lograr un gran frente, coalición, convergencia, coordinación, columna  o como queramos llamarle, de la izquierda social, civil y partidaria unida para rescatar México.
Por ello, consideramos estimados compañeros y compañeras que debemos pasar a la etapa de mayor profundidad de las acciones a seguir, trabajar en la definición del Plan de Acción y no quedarnos solo en el discurso ideológico, contestatario o retórico frente a la Dirección Nacional del PRD y ante el PAN y el PRI.
Mucho se ha hablado y escrito en relación a estos temas, sin embargo tenemos que ser más proactivos en torno a la unidad de las izquierdas, no agotar nuestras acciones conjuntas por la salida de Jesús Ortega de la Dirección Nacional y contar con la nueva dirigencia nacional, o sólo ser la unidad para resistir y no transformar, evitemos por lo tanto la sola unidad de las siglas, superemos la vieja tradición de la izquierda mexicana de una tendencia al auto engañarse, a falsificar los datos de las movilizaciones, de los mítines, de los paros, de las fuerzas de que dispone cada organización, avancemos como mucha objetividad y realismo políticos.

En relación a la Situación Nacional del PRD.
En realidad pensamos que estamos en el camino correcto, por lo tanto hay que profundizar en las 4 grandes temáticas.
  1. El impulso de la “Ruta Crítica General” acordada en el XII Congreso Nacional de Oaxtepec en el 2009, con la afiliación, estructura orgánica, Reglamentación; Comisiones de Trabajo Temáticas, El Instituto de Formación, La Organización Juvenil y las Relaciones Internacionales por ejemplos.
  2. Fortalecer los trabajos de renovación de la Dirección Nacional, al respecto tenemos la posición de que el compañero Lázaro Cárdenas Batel y un Programa de no sólo sobrevivir políticamente, sino enfocado a impulsar grandes transformaciones dentro y fuera del PRD, basado en valores y traducido en acciones concretas a nivel nacional y local.
  3. Consolidar y ampliar el G-8, no sólo luchar para que este fin de año haya pistas claras de la pronta renovación de nuestra Dirección Nacional, sino también para vigilar y garantizar que el PRD recupere el rumbo extraviado y fundamentalmente la esperanza por el cambio democrático de la mayoría del Pueblo de México.
  4. Este torrente de unidad interna del PRD, desdoblarlo con acciones concretas de unidad de las izquierdas sociales y políticas del país, tanto en las reivindicaciones económicas, sociales, políticas, culturales, científicas y electorales.

En relación al PRD de Michoacán.
Como seguramente es del conocimiento de todos ustedes, en el mes de noviembre del año próximo, celebraremos elecciones para renovar los 113 ayuntamientos, las 40 curules del Congreso Local y la gubernatura de la entidad.
Se han cumplido en términos generales con las tareas de la “Ruta Critica General” acordada en Oaxtepec en el 2009; se han tomado algunos acuerdos con bastante cuidado como parte del complicado proceso de ir construyendo poco a poco los consensos necesarios en la definición de las candidaturas, en primer lugar a la Dirección Estatal del PRD y de la gubernatura, de ello depende en buena parte las definiciones de las propuestas a los ayuntamientos y al Congreso Local.
En Michoacán la presencia de las fuerzas encabezadas por Nueva Izquierda, que coinciden con las alianzas con el PAN, en realidad en cuanto a presencia de masas, son poco significativas, se ubican más en los espacios de la Mesa Política de los representantes de las distintas corrientes.

En cuanto al G-8 en Michoacán.
En realidad somos 7 expresiones locales en referencia a 4 corrientes del G-8, las expresiones somos, Consenso XXI, Francisco José Múgica y Colectivo de Izquierda Michoacán de la RUNI; el equipo de Democracia Social; 2 expresiones de Izquierda Democrática Nacional (IDN). REDIR- MLN y la Alianza por la Unidad Democrática que no tiene formalmente participación en alguna de las corrientes nacionales.
Nos encontramos en una fase inicial de coordinación, hasta ahora cada quien en su propia dinámica, las tareas realizadas de manera conjunta se remiten a la ruedas de prensa y asistencia a estas actividades, ciertamente hay que pasar a la necesaria actividad de acciones conjuntas en diversas temáticas de línea política y organizativa.

Nuestras Propuestas hacia el Plan de Acción.
1.    Elaborar un Programa “ Plataforma de Acumulación para el Período”, que cumpla el papel de instrumento aglutinador de todos los “perdedores y agraviados por el modelo neoliberal.
2.    Realizar trabajos de educación, formación, capacitación y transformación cultural de la conciencia popular.
3.    Establecer como G-8 relación en la búsqueda de acuerdos con las organizaciones sociales, sindicales etc. Y no verlas como meras correas de transmisión de las políticas de nuestro partido, sino fundamental como entes y sujetos de la transformación democrática.
4.    Construir una fuerza social y política antisistémica, es decir, una fuerza anticapitalista, es lo que en realidad más temen las clases dominantes, no sólo hay que tener la razón, sino que hay que tenerla a tiempo y contar con la fuerza para materializarla.
5.    La nueva organización política debe estar volcada a la sociedad, inmersa en los sectores populares.
6.    Por otra parte, los mensajes de la izquierda de hoy, la izquierda de la era de la televisión y el ciberespacio, no pueden ser los mismos que los de las décadas de los sesenta, setenta y parte del ochenta; la gente hoy lee muy poco o no lee, trabajemos en torno a acciones del lenguaje audiovisual.
7.    La propuesta más clara en relación a una sociedad socialista del siglo XXI, es poner en práctica la democracia participativa sustantiva, donde el pueblo sea el verdadero protagonista de la construcción de la nueva sociedad.
8.    Necesitamos un Frente que más el acento en la práctica social y política, como lo prioritario si dejar de generar teoría, una práctica que no se contradiga con los valores de la nueva sociedad socialista a los que nos debemos encaminar.
9.    Tenemos que crear un tipo de organización-coordinación que dé cabida a los más diferentes tipos y grados de participación, donde se admitan diversos grados de formalización, estructuras lejos de la rigidez, necesitamos estructuras flexibles con mayor capacidad de respuesta inmediata.
10. La nueva cultura de la izquierda debe reflejarse también en una forma diferente de componer la dirección de la organización política y de su accionar en la sociedad.

 
PROPUESTA MORELOS


“SITUACION NACIONAL Y EL PRD”
POLITICA;
   Asistimos a esta convocatoria de militantes y dirigentes Municipales, Estatales, y Nacionales del PRD con el único objetivo, el de construir y fortalecer la Unidad Nacional.
   Ante los escenarios tan complejos en los que nos han sumergido al interior del partido, tenemos la urgente necesidad de reencontrarnos para realizar trabajos sobre el planteamiento de una ruta critica que nos permita lograr rescatar el proyecto del PRD, nuestro partido.
   El partido y sus dos vertientes al interior, una  de ellas y que es solo una fracción, con una mayoría al interior de nuestro instituto político, pero con una minoría al exterior del partido. esta concertadora y colaboracionista con el gobierno como lo dicen los analistas y críticos políticos y que además pretenden convencer  sin argumentos y con imposiciones las bondades de una alianza electoral con la derecha, los colaboracionistas del régimen imperante a contra corriente  en la búsqueda de unidad de acción  que permita a las expresiones de izquierda una plataforma mínima para pensar y actuar a favor de la reconstrucción Nacional, han decidido entregarse a los intereses de la oligarquía dominante, es claro que comparten con ellos esos mismos intereses.
   La  otra hoy en día denominada G8 la que nos lleva a la batalla en las calles y que confronta públicamente con argumentos, no solo a las instituciones publicas, si no a los demás grupos de expresión en la izquierda, con una minoría en el instituto político pero con la que coincidimos una gran mayoría al exterior del  partido
   Esto sin duda ha dividido y debilitado la imagen, llevándonos a la estrepitosa “derrota pública y electoral” prueba de ello las elecciones recientes pasadas.

ECONOMICA;
   Somos una sociedad agraviada por la dirigencia Nacional aliada al fundamentalismo económico, el cual mantiene un mercado libre y sin regulación en donde el estado no garantiza la operación del mismo mercado, obteniendo como resultado perdida en las carteras de grandes empresas financieras provocando mayor desempleo.
   Mantenemos una banca quebrada con permanente rescates del gobierno, provocando perdidas en los fondos de ahorro puesto que invierte en el rescate recursos públicos que conlleva a su ves el recorte del gasto publico, frenando el gasto y lanzando a la calle al trabajador para que el gobierno solo así mantenga finanzas equilibradas además ha venido recortando su capital en jubilaciones de los trabajadores.
   Que quede muy claro, la crisis mexicana no es importada como el gobierno quiere hacernos creer, puesto que por más de 30 años hemos aplicado políticas herradas y adoptado el neoliberalismo.

 Si sabemos que para el desarrollo requerimos dos rubros, que son:
 1.- estados financieros y crédito; teníamos bancos mixtos y hoy banca privada en manos de extranjeros.
2.-  gasto público gubernamental, teníamos más del 40% del PIB hoy en día  -20% del PIB.
     Mantenemos una tesis, que para reactivar el desarrollo requerimos déficit público, es decir que el gobierno gaste e invierta en desarrollo, para que haya empleo y a su vez genere riqueza “esto no es inflacionario”
ECONOMIA Y SOCIEDAD;
  Requerimos con urgencia reformas neoliberales ante esta economía fracasada contraria a las filiales que hoy en día son muy exitosas solo que son de extranjeros y para extranjeros.




                                                                                
DESARROLLO Y DEMOCRACIA:
   Proponemos que se contemple el crear un sistema nacional de cuidados en el empleo publico, ya que es sumamente claro que el  sector privado no atiende  ni atenderá, al barrendero, el fontanero, el campesino, el comerciante, al  doctor o al maestro, tampoco a la pequeña y mediana empresa.
Nuestra tarea más urgente es: el emple, banca y economía pública.
   Con ello es claro haremos una política responsable y de conciencia, al mismo tiempo abatiremos la delincuencia.

Nuestra lucha ha sido historiaría como histórico es lo que hoy hacemos, nacimos como luchadores sociales en contra de la explotación y a favor de la liberad no mostraremos ningún avance si actuamos contrario a los principios  que hasta ahora hemos defendido.
   Nuestra capacidad de lucha es puesta a prueba hoy, la pregunta mas importante a responder es ¿seremos capaces de realizar al programa de acción del partido, a favor de la reconstrucción Nacional  e impulsar un proyecto alternativo de nación?
   Es un paso muy importante el considerarnos capaces de transformar la realidad social de nuestro tiempo, pero hacer nada ante los hechos presentes, es no dar el paso y por tanto tener o no esa capacidad  se vuelve irrelevante, ¿Cuál es entonces el paso siguiente que debemos dar? En Morelos como una contribución al proceso político de reconstrucción nacional  proponemos un plan de acción (sujeto a discusión por supuesto) sobre los pasos que debemos dar si la dirección en la que se encuentran nuestros esfuerzos es a favor de la transformación social, política y económica del país.




DOCUMENTO DE SAN LUIS POTOSI.

En 2009, el P. R. D. sufre la caída más grave de su Historia, el Partido se fue hasta el cuarto lugar en los Estados de Guanajuato, Coahuila, Puebla, Querétaro, Jalisco, San Luis Potosí, Tamaulipas y Yucatán.
En siete estados se ubico en la quinta posición. Aguascalientes, Colima, Chihuahua, Durango, Baja California, Nuevo León y Sonora, en Campeche cayó hasta el sexto lugar.
En un año dejo de gobernar a siete millones de mexicanos, ya que, por mala administración perdió Acapulco, Chalco, Ecatepec, Texcoco y Cuidad Netzahualcóyotl. 

Ante el desastre electoral que ha llevado al P. R. D.  A LA PUERTA DE SU EXTINCIÓN como alternativa política real, valiera preguntarse  ¿como es que llegamos a ello?

Sin duda la capacidad de auto engaño de la actual dirigencia les permite seguir usurpando un mando, que, en base a los desastrosos resultados obtenidos por ellos, NO les pertenece. Jesús Ortega y sus cómplices, conocidos como ¨¨los chuchos¨  se han apoderado de la estructura burocrática y de poder, para sencillamente destruir al partido, más que un diálogo de sordos, el presente evento debe ser la exigencia de rendición de cuentas a la espuria dirección de nuestro Partido y tomar decisiones que eviten la total destrucción de una alternativa política de izquierda.

La imagen actual del Partido en muchos ámbitos se asemeja al de la ridiculez de una caricatura como complementaria a la del PRI. Manlio Fabio Beltrones, se queja amargamente: ¨¡ no me digan vendepetrias, yo vendo de todo!, y de su disfraz de mafioso se observan armas, títulos de Telmex y de Televisa, y dentro de esa dinámica, la imagen que esta administración ha labrado para el Partido es la de un perro, un chucho, lamiendo los zapatos de Calderón, sin duda la desfachatez y el cinismo priista no resultan tan nauseabundos como LA TRAICIÓN , y este es precisamente el símbolo que domina la imagen del Partido, destruyéndolo a lo largo y ancho del País.

¿Que puede prosperar, cuando la mentira, el engaño, los acuerdos y negociaciones por encima de, los Estatutos y de la mas mínima decencia dominan la vida del Partido?

Y nos volvemos a preguntar ¿por qué hemos caído en tanto desprestigio?. Hablando en concreto, en 2003 (¡sorpresa!, la memoria existe), los militantes por mayoría decidimos apoyar a Salvador Nava Calvillo como candidato a la gubernatura de nuestro Estado, labor  que se vio bloqueada por la entonces presidenta del Partido, Rosario Robles. Entonces la Señora enarboló la candidatura de Elías Dip Rame, recién salido del PRI, en donde no obtuvo su candidatura pero vino a depositar un millón en manos de Rosario, quien increpo duramente a Salvador diciéndole: ¿acaso tu tienes un millón para el Partido?. Este criterio de venta de espacios políticos a expriistas y todo tipo de gente que tenga dinero para el líder del partido, sigue plenamente vigente, al grado de postular el PRD A PERSONAJES TOTALMENTE IMPOPULARES, pero que fueron a donar su dinero al dirigente del Partido, instaurando a la política como un exclusivo deporte para ricos.

Alguien se atreve a ser tan ingenuo para pensar que los diputados plurinominales de nuestro Partido en el Estado de San Luis tienen el mínimo perfil quien se requiere para confrontar las posiciones políticas de nuestros adversarios ?.  ¿Cómo fue que dejaron pasar la deuda ilegal del último gobernador que se despidió con 1500 millones de pesos para su bolsillo?

En 2008 se va a elecciones para la dirigencia del Partido en el Estado y ante las muchas irregularidades se propone reponer el proceso, pero la dirigencia de Ortega solo avala al que llego igual que él, por medio del fraude,  al más inepto políticamente de todos: Domingo Rodrigue Martel. Este personaje ya había condenado a no ejercer cargos públicos por un lazo de 10 años, por las fuertes irregularidades durante su gestión como Alcalde de Tanlajas en la Huasteca Potosina, y que, en el momento de las elección, estaba inhabilitado.
Tratando los sufridos militantes del Partido de establecer un marco mínimo de legalidad, todas las planillas que contendieron se unifican para impedir que el personaje en cuestión asuma la presidencia del Partido, lo logran. Pero finalmente interviene el cacique Ortega y convierte a Domingo en flamante diputado plurinominal federal, que no cuenta con el más mínimo talento legislativo, pero ofrece la garantía de servidumbre para todo lo que Ortega defina, perpetuando el bajo perfil político de la mayoría de los diputados del PRD, que lo son porque los chuchos así los escogieron.
Los grandes anhelos de nuestro pueblo por una vida digna, por resolver los graves problemas que hacen sufrir a nuestra gente, nada tienen que ver con esa pequeña mafia chuchista al servicio del poder usurpador de Calderón y, en última instancia, al servicio de la mafia en el poder, los monopolios transnacionales. 

Que mejor para destruir un Partido, que reventarlos por dentro, labor que reiteradamente han ejercido los miembros de la llamada ¨Nueva Izquierda¨¨, violentando la mas mínima legalidad, lo que en la práctica produce el maximato de prebendas electorales que los chuchos otorgan a discreción, brincando se las normas del Partido o amoldando estas a sus intereses.
Pero, todo esto no hubiera sido posible sin la pasividad de otros dirigentes y militantes, o sea, todos nosotros. A final de cuentas ¿solo buscamos notoriedad y beneficios económicos de los puestos públicos? Aquí deberíamos proponer la verdadera austeridad republicana.
El Partido fundado por la convergencia de distintas expresiones de la izquierda no merece este nauseabundo presente. El pueblo de México merece verdaderos luchadores sociales y no verse traicionado todos los días por quienes nos decimos ¨de izquierda¨.